A construir la
esperanza
La reciente carta
pastoral de los obispos cubanos publicada con el título “La esperanza no
defrauda”, ciertamente merece un profundo análisis. Por un lado le está
pidiendo al gobierno que considere un cambio político, y esa es una solicitud
que va al problema fundamental de la sociedad. Pero también implica que la oposición se tiene que preparar para
esos acontecimientos.
El actual
gobierno de Cuba desde su llegada al poder ha dejado una abundante estela de
sangre. Hay mucho dolor acumulado. Hasta el momento el gobierno de Raúl Castro
ha seguido la tradición de la represión, y uno de los acontecimientos que más
lo demuestra es el reciente asesinato de Osvaldo Payá Sardiñas.
Pero yo no descarto que también en la esfera
política el gobernante pudiera aplicar el pragmatismo que ha demostrado en el
ámbito económico. En mi opinión el
cambio político ya está a la puerta porque:
1.
Esa sería la única forma de poder restablecer las
relaciones normales con los Estados Unidos, y por lo tanto tener acceso al
capital que desesperadamente necesita la isla.
2.
Raúl Castro sabe que si él fuera capaz de liderar el
cambio entonces él estaría en condiciones de manejar el proceso a su
conveniencia, como lo ha hecho en el ámbito económico.
3.
Esta pudiera ser tal vez la única oportunidad de limpiar
un poco la imagen y la trascendencia de su familia en la historia de Cuba
4.
De hecho muchas previsiones de la Constitución de 1976 ya
están obsoletas
5.
El partido comunista está sólido y organizado mientras
que la oposición está muy diseminada y ha estado trabajando en circunstancias
muy difíciles, por lo que el pueblo no la conoce.
6.
Así como Hugo Chávez, Correa y Ortega fueron electos por
mayoría, es muy lógico que él pueda aspirar lo mismo para su partido,
considerando una población muy joven que no conoce el sistema anterior, ha
sido formada por ellos y carece de información imparcial.
En mi opinión las
fuerzas políticas opositoras tienen que lograr posiciones unidas y no dejar que
nada ni nadie resquebraje esa unidad. El concepto central debe ser que el
pueblo de Cuba es uno sólo, ya sea el que vive en Cuba o el que vive en el
exterior.
Por otro lado
es imprescindible fortalecer los
partidos políticos, porque ellos son los actores fundamentales en un sistema
democrático. Y en ese aspecto, lograr la identificación con los jóvenes cubanos
y ampliar la base en Cuba es imprescindible.
La pregunta es si
la oposición aceptará el reto de la propuesta del actual gobierno de la isla,
porque pienso que tal vez esa esté ya en
camino.
Estela Teresita
Delgado
No comments:
Post a Comment