En el día de ayer, domingo
23 de enero, asistí, junto a otros miembros de mi parroquia, a este evento
nacional anual que se celebró en Miami, el que siempre pongo en mi agenda y en
el que he estado participando desde hace ya varios años.
El evento fue enriquecedor y
motivador, por lo que existen diversos aspectos a destacar. No puede uno cubrir
todo el evento pero quería referirme específicamente a un tema.
Luego de la reflexión
inicial fuimos a la capilla de la Iglesia para disfrutar de la Adoración al
Santísimo Sacramento. Los que conocen esta práctica saben del extraordinario
gozo espiritual que se siente, pero específicamente quisiera referirme a la
lectura escogida por el diácono Roberto Landrón para ese momento, I Corintios
12: 12-30. En esa carta el apóstol San Pablo hace referencia a la importancia
de cada parte del cuerpo, y como todas son importantes y ayudan al buen
desempeño de todo el cuerpo. Esa es la
lectura que además, se leerá en todas las iglesias católicas este domingo.
El otra parte del programa
los niños de la iglesia de San Pedro de Naples representaron una escenificación
donde en una asamblea unas herramientas se criticaban una a la otra por sus “defectos”,
al martillo por la bulla, al tornillo por solo dar vueltas, al metro por querer
ser perfecto siempre, a la lija por áspera, y así sucesivamente. Luego vino el carpintero
y utilizándolas a todas hizo una hermosa talla del rostro de Jesús en madera.
Otro de los expositores de
uno de los temas hizo referencias a la necesidad de trabajar juntos a pesar de
las diferencias, de nuestros puntos débiles y nuestros defectos. Por su parte
el sacerdote hizo referencias a no juzgar a nuestros hermanos cristianos no católicos, y fijarnos en su devoción por la
palabra del Señor y sus obras.
El tema del taller era “Pedro
y Pablo, discípulos y misioneros”. Me quedé maravillada de cómo el Espíritu Santo trabaja para que
todo conspire a un propósito común, y para mí uno de los grandes mensajes del
taller fue el comprender la importancia
del trabajo de equipo y que cuando uno es discípulo y sigue a un solo Dios y
toma la misión de servirle, todas los pensamientos, las acciones y las palabras
coinciden.
Gracias, Señor, por el
Taller #23 de Movimiento de Mayordomía Cristiana Por Amor A Cristo.
Estela Teresita Delgado
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