
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) de Cuba había reportado desde el pasado verano unas 816,000 en la isla estaban afectadas por la sequía en la isla. En ese momento ya había 191 fuentes de abasto afectadas parcialmente y 48 estaban afectadas totalmente.
Las precipitaciones estuvieron por encima de la media, pero la situación de la capacidad embalsada estaba en crisis. La provincia de Santiago de Cuba era de las más afectadas con 51 fuentes con problemas, en total 10 provincias tenían los embalses al 50% y Ciego de Ávila estaba al 25%. En este momento ya Ciego de Ávila tiene solo el 17% de la capacidad.
Siguen los problemas en la isla con los salideros, aun en Ciego hay 83 salideros pendientes de arreglar. Según algunos funcionarios reconocieron que la mitad del agua bombeada se perdía antes de llegar a los hogares debido al mal estado de las redes, Unas 50,000 personas estaban recibiendo el agua en pipas. El proceso de salinización de los suelos continúa avanzando.
Sabemos que nuestra isla tiene ríos muy cortos y estrechos, que no tenemos muchas fuentes nacionales de agua, pero por eso mismo la administración de este preciado líquido es algo clave. Eso no es nuevo y no debe sorprender a nadie.
Luego de ver crecer frutos enormes en la zona desértica de Israel, la aplicación del regadío por goteo, la purificación de las aguas negras, la dulcificación del agua salada quedando limpia y sin olor ni sabor…Luego de todo eso, mi opinión es que en la administración de los recursos hidráulicos la ineficiencia ha producido un enorme daño a la economía y la población. Eso es serio, sin agua no hay vida.
Cuba anuncia aumentos importantes del turismo cada año, es lógico preguntar sobre el destino de esos ingresos. Pero claro, como en el país los dirigentes no rinden cuenta de lo que hacen, es de esperar que el número de personas recibiendo el agua por pipas aumente.
Estela Teresita Delgado