Mercadeo útil y libre de auxilio social, (MULAS)

En la economía de mercado para que un producto o servicio funcione con éxito tiene que resolver una necesidad de los consumidores. La transportación de productos a Cuba de manera informal por medio de pasajeros llamados popularmente “mulas” se produce entre otras cosas por las siguientes causas:

1.       Una gran parte de la comunidad exiliada trabaja y no puede ausentarse con frecuencia de los centros de trabajo, además que los viajes a Cuba resultan caros. El envío de paquetes con propios le permiten hacer llegar algunas cosas imprescindibles o de urgencia.

2.       Las tarifas aduaneras establecidas por la dictadura son abusivas.

3.       No existen desde los Estados Unidos agencias de transportación de carga a precios económicos y con mecanismos oficiales funcionales, cosa que he podido constatar que si funcionan con eficiencia para otros destinos como México, Guatemala, Colombia…

4.       La dictadura no vende insumos a cuentapropistas, ni el sistema les permite importar y exportar libremente.

5.       Las tiendas estatales están abastecidas con productos de mala calidad y caros. A precios muy económicos se pueden enviar algunos productos que además de resolverle el problema a alguien permite que el impacto de la inversión de una ayuda a la familia sea mayor.

6.       El envío de paquetería comenzó con empresas del estado cubano que pusieron precios abusivos para servicios que solo ellos podían ofrecer. En la actualidad, con precios de vuelos más económicos es posible que otros ofrezcan esos servicios a iguales o mejores precios utilizando pasajeros para la transportación.

La dictadura tiene el monopolio del comercio en el país de acuerdo con la payasada de constitución que establecieron en 1976. Ellos pueden tomar medidas que permitan el surgimiento de agencias de cargas que con mecanismos usados internacionalmente y con tarifas aduanales coherentes puedan ofrecer ese servicio. Pero ya sabemos, tienen mentalidad de bodegueros monopolistas y atacan a la mala a las mulas, pero no resuelven el problema. Lo mismo de siempre.

Estela Teresita Delgado